La interactividad de la fotografía

La fotografía se incorpora al proyecto desde sus primeros planteamientos. Surge por la propia naturaleza del claustro, que por si parece ser una escenografía digna de ser captada en imágenes, y que invita a un análisis visual de lo que ahí podía acontecer.

Normalmente la fotografía surge a posteriori, solo para captar un resultado, en este caso, se convierte en pieza fundamental del proceso, adquiriendo un valor similar a la propia danza, o al entorno en donde se desarrolla.

La fotografía muestra a través de las imágenes una materialización de la idea de construcción-destrucción. Por un lado es capaz de solidificar un estado de capas que de otra manera estarían en perpetuo cambio, y por otro tiene el valor de paso intermedio y elemento final. Es el paso intermedio que permite un análisis y de ahí una evolución. Se reconoce que la percepción particular del fotógrafo es capaz de transformar la realidad en otra paralela. Es esto el elemento final, la permanecía de la propia fotografía, capaz de sustituir a la realidad que representa.

Elena Pérez Garrigues

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